Mensaje de Mons. Schwanger

Querida familia de Nuestra Señora de Lourdes,
¡Feliz 4 de Julio!
Escribo desde Lourdes y como ya he dicho
antes, los que llevan nuestra bandera y nuestro estandarte
son de las personas más populares de Lourdes. Todo el
mundo quiere fotografiarse con nuestro estandarte y la
bandera estadounidense.
Comparto esto con ustedes porque a veces podemos sentirnos frustrados, desanimados o escépticos cuando nos enfrentamos a los retos cotidianos de vivir juntos como pueblo. Luchamos por encontrar un camino juntos. Con todo, es evidente que personas de todo el mundo ven lo bueno en nosotros y en la forma en que nos gobernamos.
El Día de la Independencia es un buen día para dar las gracias y rezar por nuestros representantes electos. Es alentador que tengamos hombres y mujeres que desean servir a este país y están dispuestos a sufrir todo lo que conlleva un cargo electo. No contentos con quedarse al margen, se ponen al frente e intentan marcar la diferencia. Ni nosotros ni ellos debemos olvidar nunca la dignidad de los cargos a los que aspiran ni rebajar lo que se exige a quienes prestan un buen servicio.
Tampoco debemos olvidar la dignidad del cargo de ciudadano. Ser ciudadano permite participar activamente en el proceso continuo de definirnos como pueblo. Corresponde al ciudadano discernir quién está mejor preparado para desempeñar un cargo electo. Nuestros representantes electos ocupan sus respectivos cargos con la autoridad que les otorgamos nosotros, el pueblo. Tienen la responsabilidad de dirigir y servir y no pueden hacerlo bien sin nuestra ayuda regular y atenta. Al celebrar esta gran nación, recordamos que “nosotros, el pueblo”, tenemos la bendición y la responsabilidad de hacerla realidad hoy y transmitirla al mañana. Que Dios los bendiga y ¡felicidades!.
Mons. Schwanger
Pastor